Por el borde

Villa Pehuenia
Enero 2006
Los Pehuenes crecen también en los bordes.




Desde un texto de Apollinaire que me enviaron surgieron algunas asociaciones
Pienso que esto de andar por los bordes ha sido muy habitual en nosotros, por el borde del sentir, por el borde del querer, por el borde del ocultamiento, por el borde del placer, por el borde de la angustia , por el borde del amor, por el borde del desamor, por el borde de la tristeza, por el borde de la alegría, por el borde de la esperanza, por el borde de la locura, por el borde de la agresión, por el borde del olvido, por el borde de la vida, caminado por el filo más agudo, sin querer mirar hacia abajo, sin tirar ninguna piedra para detenernos a escuchar el sonido, era mejor seguir “por el borde”.
Ahora, cuando el empujón nos fue dado, empezamos a caer y sucedió que la energía de nuestro mundo de pareja, nuestro amor, nos ha hecho comenzar a volar. Aprender a volar es la consigna!!!!!!!

Texto de Guillaume Apollinaire:

Acérquense al borde -les dijo.
No podemos, tenemos miedo -contestaron.
Acérquense al borde -repitió.
No podemos, nos caeremos -se quejaron.
Acérquense al borde -insistió.
Y se acercaron. Él los empujó,
y levantaron vuelo...

Sólo viviendo absurdamente
se podría romper alguna vez
este absurdo infinito. Julio Cortázar

Las interferencias

Esta imagen me parece hermosa para empezar a sonreír.


Muchas veces las interferencias se hacen tremendamente duras, agudas y difíciles de “digerir” sobre todo cuando proviene de ocultamientos o engaños que flotaron dentro de la pareja.
Pero es evidente que quien quiere destruir sabiendo que ya esta todo dicho, algo tendrá que solucionar personalmente.
Solo se puede superar la agresión si todo está claro, no hay duda que recobrar la comunicación es tan importante como el deseo de estar con el otro.

Las manos en el cuerpo.
Por la noche, cuando el sueño ha invadido ese cuerpo tan amado, asiento sobre el pecho la palma de la mano, parece que abarca todo la superficie, hay calor, energía, y sobre mi mano la palma de su mano tomándome. Las otras manos entrelazadas. Hay un trasmitir, una calma, un éxtasis que parece llegar de algún lugar muy profundo. Es nuestra historia atravesada por los años, son nuestras vidas entrecruzadas.
Cuanto placer, cuanta plenitud.
A pesar que los pensamientos desafían ese momento, disfruto plenamente el momento. El calor entre mezclado era ardor interno, pero la paz que llegaba del entre sueño lograba el más tranquilo y precioso momento.

LAS MANOS DEL DÍA de Pablo Neruda
Una mano es un cuerpo,
un cuerpo es una mano,
vivimos
cuerpo a cuerpo,
y mano a mano fue la vida,
alcanzar, poseer,
tocar, entrelazar
y despedir.

Una vida juntos

Hace 40 años que vivo con el mismo hombre, y no es algo que me pese.
Puedo hablar del amor, tambien del desamor
Puedo contar encuentros, tambien desencuentros
Hoy puedo festejar el amor, por eso la idea de este blog
No siempre he celebrado, los momento de una pareja son desiguales, por lo menos los nuestro así han sido
Quisiera que este enamoramiento continue por muchísimo tiempo, por siempre. Eso mismo lo debo haber pensado hace 40 años y sin embargo no siempre fue así.
La vida no es tan lineal como uno la quiere diseñar, y es allí, cuando dejamos lo simple, lo pensado, lo estructurado, cuando tenemos que reconstruimos o tiramos todo para abandonar lo que creíamos único.