lunes, agosto 16, 2021

Olegario Víctor Andrade

 Todo está como era entonces

Olegario Víctor Andrade

Todo está como era entonces:
la casa, la calle, el río,
los árboles con sus hojas
y las ramas con sus nidos.

Todo está, nada ha cambiado,
el horizonte es el mismo;
lo que dicen esas brisas


ya otras veces me lo han dicho.

Ondas, aves y murmullos
son mis viejos conocidos,
confidentes del secreto
de mis primeros suspiros.

Bajo aquel sauce que moja
su cabellera en el río
largas horas he pasado
a solas con mis delirios.

Todo está, nada ha cambiado

Sólo el niño se ha vuelto hombre
y el hombre tanto ha sufrido
que apenas trae en el alma
la soledad del vacío.